Nos vamos volviendo viejos

Por LUNES

Esta vez no voy a escribir sobre arte, a pesar de haber visto varias pelis este finde (Alicia en el país de las maravillas, Preciosa, Un hombre serio, etc.). Esto se debe a que estamos ya a mitad de marzo, época en que todo vuelve a empezar: cursos, talleres, clases, torneos, campeonatos. Y este año, que se viene de cambios, me hizo reflexionar acerca de la adultez que estoy alcanzando.

El 2009 fue un año desastroso en muchos sentidos, pero no en el académico. Finalmente terminé mi tercer año de carrera sin tener que dar ningún final y cayendo en la cuenta de que rendí 22 materias, y que solo me quedan 4 para el título. El año pasado finalicé con muchos miedos, acerca de lo que iba a hacer, si era capaz de moverme en el mundo del arte como una futura Licenciada en Crítica de Arte.

Llegan entonces estos momentos de la vida en que caemos en la cuenta de que estamos creciendo. Ya quedaron lejos los años de viajes de egresados, y la emoción de terminar el colegio, ahora me doy cuenta que todavía nos faltaba mucho por crecer. Es ahora cuando una empieza a reconocer que se está convirtiendo en una persona adulta. Muchas de las "amiguitas del cole" se reciben este año, o el que viene (todo depende de nuestras capacidades en el 2010, obvio), alguna que otra está embarazada, alguna otra se arrepintió de sus estudios y decide cambiar, algunas se van al extranjero con sus novios a pasar unas vacaciones, y así estamos...

Pero a fin de cuentas, a los 22 años una se siente a la mitad: se recibe jóven, pero se recibe. Varias de las que sólo nos queda la cursada de este año aún no lo podemos creer PERO ya venimos haciendo planes para un 2011 sin universidad, con proyectos muy distintos pero sin los viajes a cursar a "la facu".

Todo esto viene a que hoy iba a ser mi último primer día de clases. Como dije, el año pasado estaba asustada pero este estoy ansiosa. Ya quiero terminar, dar mi tesis, ser una licenciada en Crítica, creo que en parte algo le debo a este blog gracias al cual no perdí la costumbre de mi amada escritura de críticas. Pero mi lunes 15 de marzo se convirtió en mi último primer día que falta la profe (Gracias sra. que no conozco por haberme hecho levantar a las 6.45, viajar 1.15 hs de viaje, esperar 1.40 hs. en el Instituto, 2 hs. para mi horario de trabajo y por tirarme un baldazo de agua fría a mi emosión). Entonces el jueves será mi último primer día de clases....

Mejor dejo de pensar un poco en los últimos primeros días, paro de enredarme y me pongo a disfrutar de la sensación de crecer, de estar más cerca de la meta... Algo que parecía tan imposible está llegando. Hoy me siento más adulta (eso que ni tuve clases)... Y es así... nos vamos volviendo viejos.