jueves, 14 de abril de 2011

¿Qué hacer cuando una se cansa de una misma?

¡Hola!

¿Cómo están?

Es una etapa rara para mi, mi hoy, mi ayer y mi semana pasada… Sí, estoy cansada de mi un poco, va para gritarlo con plena honestidad brutal estoy harta de mi por hoy, por ayer, por la semana pasada.

No se como llego este estado, pero ahora creo ver y entender que las señales fueron contundentes, no le sumo a nadie, no me sumo a mi.

No se como decirlo, pero digamos que desde hace tiempo tengo la idea de que necesito algo nuevo y lo más gracioso es que no se que es.

Puede sonar frívolo y ridículo pero cuando comencé la búsqueda para sacarme esta duda que me carcome se me ocurrió empezar por un cambio de look, fui a la peluquera, pero no a mi peluquera de cabecera y bue… como supuse cuando puse un pie dentro salí mas disconforme que antes, no era lo que buscaba, yo fui con la idea de un cambio radical y volví casi igual, pero con un corte de vieja.

Busque ropa que nunca elegiría, cosas que por ahí no se, me hicieran ver diferente como por ejemplo ropa con colores y no, lo que devolvió el espejo fue un payaso, porque además de siempre vestir de negro no se combinar los colores.

Fui seria durante todo un día, no me resulto me sentía otra y no era la idea, hasta yo misma me aburrí.

Me deje llevar por la melancolía, pensé en mi mal de amores, en lo mal que llevo algunas cosas, puse mala onda, todo con la idea de que si me sentía mal quizás surgiría algo nuevo; pero no, no pude, puede más mi odioso optimismo.

Dije que No varias veces (no piensen mal), me cuesta mucho decir que NO, y como era de esperarse a la segunda vez me dio culpa y todo los demás fue Si al por mayor.
Lo bueno fue cuando llego el día de la clase de italiano, era donde me iba a poner aprueba para ver si toda esta estupidez que arme me resultaba para ser alguien nuevo, esto fue lo que paso: descomprimí, me reí mucho, aprendí, hable a lo largo y a lo ancho, vi pato con Viernes, la noche terminó con buenas, divertidas, originales y naturales ocurrencias y volví a mi lugar, el que sospecho nunca deje.

Cuando tome el colectivo, me puse los auriculares me situé en la burbuja de la música y charle conmigo y pensé que soy así que quizás eso nuevo es otra cosa no cambiar mi esencia, no querer algo que no soy, que me va mejor siendo yo que oprimiéndome.

No se si encontre la solución, creo que me siento todavia cansada de mi un poco, pero esta vez solo un poco, muy poquito.

Ya se ustedes dirán que estoy loca, que no gane nada, que todo esto es una estupidez, pero me sirvió para darme cuenta que uno puedo estar bajoneado, tener la culpa de todo, no saber para donde ir y saber que siempre hay algo, alguien que sin saber o sabiendo que sacando una sonrisa para nosotras nos devuelve la calma, nos hace sentir acompañadas, que si bien no soy de contar mucho lo que me pasa basta solo una mirada cómplice, un mensaje de texto para que mis días vuelvan a brillar y mi optimismo se refuerce.

Gracias a mi gente y a la reciprocidad del vínculo mis días siempre tienen finales felices y no nos hace falta comer las perdices.

¡Buen fin de semana!

¡Saludos!

JUEVES

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