jueves, 2 de febrero de 2012

Respirando azul clarito

¡Hola!

¿Cómo arrancaron febrero?
Yo rara, pero rara para bien no se…

Ayer me junte con dos amigas que están de novias y hablando de sus cosas en un momento me quede pensando que me quedaba a tras en varios aspectos no solo en el amoroso. Nunca fui una de esas que sigue a la manada, en varios aspectos se los digo, podría detallar pero no es lo que quiero decir hoy.

La semana pasada me fui de vacaciones con mis hermanas a un lugar hermoso donde el cielo es más azul que en ningún otro lado, donde las noche te cubren con sus mando de mil estrellas y si bien les quise sacar una foto mis competencia para eso no son muy buenas y no me salió el truco, esas noches así, donde el aire fresco no solo te mantiene fresco el cuerpo sino el alma, y los pensamientos salen más puros, me surgió una inquietud.

Llegue el domingo y acá en la ciudad también el azul cielo acompaño, y la brisa llego hasta acá para decirme que debo seguir con los bueno augurios y buenos aires.

Estoy yendo  hacia ningún lugar pero les comento eso a modo de introducción para poder explicar mejor lo que pienso y siento hoy.

Como dije en el primer párrafo hablando con mis amigas de sus lindas experiencias y de lo bien que se sentían en varios niveles y de los proyectos que tienen me hiso pensar que el año pasado no ha sido un año en que la madurez golpeó mi puerta seguido, si bien he mirado más introspectivamente y he analizado mi todo, pienso que me faltan tanas cosas, siempre mirando el vaso medio lleno pero ahora que miro bien veo un cuarto del vaso lleno solamente, no porque haya perdido el optimismo, pero creo que estoy por ahora del lado de la realidad, lo que no quiere decir que esta sea una mala realidad.

Me enrede.

Lo que quiero decir es que con mis 23 años ya para 24 siento que no he avanzado nada, el lo emocional, no he madurado lo suficiente, aunque tenga una respuesta para todo, no siempre la respuesta es sabia, no siempre me siento conforme.

Como dije antes nunca fui de esas que siguen a la manada, tampoco me hago la rara, la única, la que no es igual que nadie, la intocable, la más más, porque no lo soy, soy una más del montón pero sin seguir a la manada en varias cosas (estoy repetitiva lo se).

Como dije no he tenido historias amorosas, no se lo que es estar con alguien en ningún sentido, y eso me deja en un último lugar, en una lugar de que no evoluciono, en un lugar en donde no puede conocerme en otro aspecto en otras circunstancias, en otras palabras, en otros sentires, en otras yerbas, quizás no estoy siendo clara, pero es raro como dije antes.

Lo que me propuse es mirarme desde afuera, es salirme de mí y mirar, como esa vez que desnude a las 4 mujeres que hay en mí, solo que en esta oportunidad me mire como un todo, pero con respuesta de todas, sobre todo y fue un alboroto, todas hablan a la vez, todas tiene sus opiniones, todas saben que hacer pero ninguna solución en viable, ninguna se decide por nada, todas coinciden en que nada les gusta demasiado y que por una cosa o por otra directa o indirectamente no he crecido tanto como lo quise, tanto como lo esperaba, tanto como lo anhelaba.

Me vi vulnerable, me vi fuerte (contradictorio, lo se), me vi sola, me vi muy bien acompañada de mis afectos irrompibles, me vi aniñada, me vi como una mina de la edad que tengo con todo lo que eso quiere decir, me vi como hija, me vi como hermana, me vi como tía, como amiga, cumpliendo como puedo esos roles de la mejor manera, me vi rara, me vi contenta, me vi con muchas cosas pendientes, me vi otra y volví a ver la misma, me vi extraña, vi una vieja conocida, vi los miedos y los aciertos que no tengo, vi que le debo mucho a todos y que nunca voy a poder saldar la deuda y también me vi apostando poco por mi, me vi en la cuerda floja y luego me vi con toda la seguridad que nunca tuve, me ví risueña me vi triste, me vi como siempre, me vi responsable, me vi vaga, me vi apurada, me vi tranquila, me vi hecha una furia, me vi calma como el día, me vi atrapada en el tiempo, me vi pasando el tiempo, me vi agarrando y soltando.

Me sentí una extraña en mi cuerpo.

Me sentí que volaba y que de repente  llegaba al suelo en caída libre y todo eso bajo un cielo azul muy azul y aunque no sea verde me llena de esperanza.

¡Buen fin de semana!

¡Saludos!

Jueves.

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